No puedo hacerte un poema, no sé de qué escribirte.
Todo lo que siento no es novedad para ti, te lo he dicho de una y mil maneras.
Ya no hay palabras para describir (de alguna forma) lo que es compartir
todo esto de mi vida contigo.
No puedo descargar rabia,
porque mis enojos contigo duran segundos.
No puedo escribir sobre desdichas, simplemente,
porque me haces feliz todo el tiempo.
No tiene sentido hablar de ti, porque lo que diga
no será suficiente... Para describir la realidad.
¡Viste! Lo siento...
Ahora no, no puedo escribirte un poema.
Me identifico con esto.
ResponderEliminarla diferencia entre pensar, hacer y sentir...
ResponderEliminarquizás no hay que hacer ninguna, quizás todas, quizás unas si u otras no. Las interrogantes están en todos lados, pero es labor de uno decidir por las que van y por las que quedan.
Quedarse... por un tiempo... como hoy.